Ya veo porque no mejora el tema de la violencia doméstica.
Leía el otro día esta noticia y, sinceramente, me escandalizaba con los últimos párrafos. En concreto con:
"Puede maltratar el que tiene poder, de lo contrario sería como si el acoso laboral lo ejercieran los empleados sobre el jefe, sería ilógico". Sáez recurre al ejemplo de los hijos que pegan a los padres: "Los padres son los adultos, tienen la fuerza física, el dinero, todos los criterios para elegir con libertad y sin embargo, algunos se dejan pegar. Pero podrían evitarlo. Eso mismo pueden hacer los hombres en su mayoría. No podemos confundirlo todo".
Pero, ¿no llevan años diciéndonos que la principal causa de la violencia doméstica continuada es la dependencia emocional por parte de la víctima? ¿Que hay de aquello de que es la propia creencia en que se quiere al agresor, en que la relación puede cambiar, en que las cosas mejorarán si pone de su parte, es la gran trampa que atrapa a la víctima y le impide huir del agresor? ¿Esa teoría es falsa? Un hombre al que le pega su mujer, o unos padres a los que les pegan sus hijos, ¿no tienen esta dependencia? ¿No están atrapados ahí y eso es lo que les impide poner remedio?
Porque lo que propone este señor es el mismo argumento, que yo creía superado ya, de que "en el mundo en el que vivimos en que las mujeres no tienen dependencia económica de sus parejas, si les pegan es porque se dejan, ya que siempre podrían coger la puerta y marcharse".
En fin, que no se quien es este Hilario Sáez, porque hasta este artículo no lo tenía controlado, pero si tiene un cargo de tanta importancia como el que google esboza, empiezo a explicarme muchas cosas, y el porqué las políticas contra la violencia doméstica no acaban de funcionar. Si ya sus responsables no tienen claras las cosas, mal vamos.
Personalmente creo que es ahí donde habría que trabajar en definir la violencia doméstica, no sólo en el abuso de poder, sino sobretodo aquella en la cual la víctima tiene dependencia emocional con respecto al agresor y eso le dificulta -si no impide- la huida o la autoprotección. Y olvidémonos de si la víctima es hombre, mujer, adulto, niño, padre, o hijo. Al final, el denominador común es ese.
1 comentario
Vesania.- -
Respecto del tema de la violencia doméstica, hablar como ha hablado ese tío es no tener ni puta idea.