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bambino, el blog de Fernando Tomás.

Se acabó lo que se daba

Bueno, pues eso, que se acabó el llamado "proceso".

Sinceramente, nunca le tuve mucha fe. Creo que para que pueda existir una solución negociada los negociadores tienen que estar en situaciones simétricas. Con una de las partes, la violenta, con todo por ganar y nada que perder, la negociación es, sino imposible, difícil. Muy difícil.

En un análisis rápido, hay tres vías para que esto acabe:

La policial: que se consiga acotolar del todo a ETA. Dura y a muy largo plazo. Pero quizá la única posible.

La unilateral: que ETA deje las armas porque si. Difícil también porque hay mucha gente que ha hecho de ETA su modo de vida.

La negociada: absolutamente imposible, ya para que ETA quisiera realmente negociar tendría que darse una situación simétrica similar a la de Irlanda: etarras y simpatizantes asesinados, barrios segmentados por ideologías y separados por muros, que los favorables a ETA tuvieran miedo de salir a la calle también. Para que eso sucediera, los hasta ahora acosados deberían dejar la vía democracia y tomar las armas, cosa que no parece muy probable. Y además, en un entorno en el que el 90% de la población vive como si no estuviera ocurriendo nada, en una región próspera económicamente y activa culturalmente, me parece muy difícil que llegue a darse el caso. 

 

Así pues, ánimo a todos, que hay ETA para rato. De todas maneras, si somos objetivos, es más fácil morir de accidente de coche o de cáncer que de atentado terrorista. Vuelvo a reiterar que les estamos dando demasiada importancia. 

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