Sensaciones desde el Santuario del Pueyo, en el somontano de Barbastro
Tristeza al encontrar dos huevicos, frios ya, en un cobertizo donde cerraron la ventana y su madre nunca más pudo volver.
Placidez tomando el sol del otoño y contemplando las vistas.
Esfuerzo del labrador preparando la tierra para ver si la campaña siguiente se da mejor.
Sorpresa al ver que los monasterios a mediohacer se completan con torres para antenas de difusión de TV y FM.
Y sabrosa comida, buen vino y agradable sobremesa en el restaurante.
P.D. Las fotos están a más resolución. Pulsándolas puedes ver más.
P.D.2 280 Km más a añadir a los anteriores ayer, esta vez con camiones y transportes especiales...
1 comentario
Vesania. -
;-P