Vaya título le he puesto al post. Pero si, toda esta vida social conectada añadida, no deja de ser una especie de Realidad Aumentada, al menos en nivel conceptual lo es, en el terreno social.
Porque vía correo, skype, blog, twitter, facebook, etc, estoy conectado con gente con la que normalmente físicamente no coincido, pero también con gente con la que físicamente coincido, con algunos a diario, y con otros cada cierto tiempo.
Surgen nuevas situaciones, como cuando has quedado con alguien para hablar algo importante y llegas y ya está todo dicho: te lo has ido contando durante el día vía los múltiples canales de comunicacione que hay abiertos. Y la cita consiste en rememorar lo ya hablado. O como me viene sucediendo, que las cosas de importancia se tratan de forma instantánea, por correo o skype, gtalk o similar, y las reuniones en persona son ya en plan relax o lúdicas.
Y surgen dudas sobre como gestionar otras:
¿Si alguien me desamiga en facebook, significa que ya no es mi amigo tampoco en la vida real? ¿Me negará el saludo si me lo encuentro por la calle? ¿O por el contrario lo que ocurre es únicamente que me considera aburrido/prescindible/pesado ... en cuyo caso el que se ofende soy yo y el que le va a negar el saludo soy yo?
¿Basta enviar un sms, publicar en el blog, enviar un mensaje privado en twitter o facebook, o hacer público en cualquier red social algo para considerar que el destinatario del mensaje se da por enterado? ¿O por el contrario será necesario el cara a cara? ¿Y quien decide cuando se hace de una manera u otra? ¿Por qué sirve una carta y no un e-mail o un mensaje directo?
(Caso real: he visto gente enfadada porque no se le había dicho personalmente que alguien se casaba, y la justificación fué: ya lo dije en mi blog: si no me lees o no tienes fichada mi RSS igual es que tampoco te es tan importante conocer mis noticias).
Y no, no sirve mentar el sentido común para esto. Porque no hay ni norma escrita, ni práctica previa, ni nada donde agarrarse. El sentido común en este caso es pionero en el campo, y se decida lo que se decida, se podrá hacer con sentido común, y de forma diferente entre varias personas.
Seguramente necesitemos un esfuerzo añadido de inteligencia emocional para gestionar todas estas relaciones personales aumentadas vía red.