La escucha activa: O lo fantástico que es cuando te tratan con interés y delicadeza
Dos ejemplos que me han pasado últimamente que me han hecho sentir genial:
1) Me llaman de una empresa de encuestas de opinión, supongo que habiendo obtenido mis datos a partir de alguna de las revistas técnicas a las que estoy suscrito. Por mi tipo de trabajo, formación, grado de responsabilidad, ciudad en la que vivo y trabajo, etc, consideran que mi opinión es relavante para un estudio que están llevando a cabo. Si, es una lotería, pero de alguna manera es algo que, ya de buenas a primeras estimula el ego profesional. Además, me piden mi colaboración, de una forma tan amable y tienen en cuenta mi opinión de una forma que me hace sentir tan valioso e importante que lo hubiera hecho de forma altruista. Pero es que, además, ¡después me enviaron una compensación como agradecimiento!.
2) Envío mis datos para salir en un programa de televisión. Se ponen en contacto conmigo unos redactores y quedamos para hablar. No se si acabaré yendo a la tele, pero lo que si se es que las dos horas que estuvieron escuchando lo que yo tenía que decir me hicieron sentir igual que en el caso anterior: comprendido y valorado. Sólo con eso ya merece la pena el intento.
En fin, que empíricamente he comprobado lo genial que uno se siente cuando se le escucha y se le valora... y me pregunto ¿por qué lo hacemos tan poco?
3 comentarios
Fernando -
Santi -
Durante una temporada fuimos seleccionados, por el Instituto de Estadística, como familia típica. Durante un año nos entrevistaban periódicamente.
La duda que me quedó es ¿qué entienden por familia típica?
Vesania.- -
¿qué pasa, que estás intentando emular a edans o qué?¿estás celoso? :-P
Por cierto, fui YO la que escribi al programa de TV!!!!
Un beso bicho, bueno uno no... dos o tres ya que estamos.
:-)