Rugby y política antiterrorista.
He jugado al rugby.
Y eso, querámoslo o no, imprime carácter.
En el rugby, un jugador en fuera de juego no existe. Y como no existe, como es nadie, nadie recibe golpes, nadie recibe pisotones por intentar engañar, por intentar aprovecharse de no respetar las reglas del juego. Golpes y pisotones que se suceden hasta que el jugador vuelve a posición reglamentaria, momento en el que cesan. Por supuesto, el arbitro no ve que se haga nada a nadie mientras está en fuera de juego.
Hoy, y aunque en su día me escandalizó, no me extraña que en una sociedad que vive el rugby como la británica, se aceptara la política antiterrorista de (creo que) Margaret Thatcher, aquel "Terrorista identificado, terrorista muerto", que trajo incidentes como aquél de Gibraltar. Los terroristas no dejan de ser gente que está en fuera de juego.
Pienso en todo esto al leer los comentarios a la noticia de la detención de dos etarras, uno de ellos con lesiones durante la misma. Siempre la misma historia, dudas, intrigas, indignaciones, mala sangre... cuando todo se reduce a tres palabras: "fuera de juego". No hay mucho mas que cuestionar. Estaban en fuera de juego, y ha habido que actuar con fuerza para que salieran de su situación ilegal.
Hace falta ser noble para aplicar la regla del fuera de juego sin abusar de ella, claro. Pero la nobleza al jugador de rugby se le presupone.
Ay, cuanto rugby nos hace falta jugar en este país...
2 comentarios
SantIP -
Y la publicidad gratuita de los medios de comunicación. les ofrecemos demasiado tiempo, demasiado espacio. Incluso el tiempo que hemos dedicado ahora es excesivo.
Carlos -