El pollo y el amianto
(Por aquello de ser ingeniero de "operaciones especiales", me ha tocado formarme en muchos aspectos distintos, y soy, entre otras cosas, técnico de prevención de riesgos laborales, así que hoy el post va prevención de riesgos y de responsabilidad social de las empresas ante las consecuenciaas de sus actos)
En estos días, con todo el jaleo de la intoxicación por salmonella en el pollo precocinado, he visto una similitud tremenda del caso (incluyendo a la empresa fabricante del producto envenenado (el grupo Sada)), con otro caso de contaminación muy peligrosa para la salud: el caso del amianto, y como reaccionaron las distintas empresas cuando se descubrió que su producto estaba haciendo enfermar a muchísima gente.
En el caso del amianto, cuando se empezó a comprobar que la gente enfermaba, hubo dos actitudes:
-La primera, negar los hechos, tratar de eludir responsabilidades.
-La segunda, transparencia, investigación independiente de los hechos, ofrecimiento de indemnizaciónes.
Al cabo de unos años, cuando se demostró la peligrosidad del producto, sólo las empresas que reaccionaron de forma colaborativa, sobrevivieron. Y lo hicieron porque pudieron hacer frente a las indemnizaciones, no tuvieron condena penal, obtuvieron avales para continuar, y lo mas importante, conservaron la credibilidad ante sus clientes: han hecho algo mal, lo han detectado, han dejado de hacerlo, y ofrecen reparación. La actitud es moralmente intachable.
Por eso he llegado a la conclusión de que, bien el director del Grupo Sada es muy inteligente, bien ha estudiado el caso del amianto en algún master. Ofrece transparencia, ofrece información, ofrece indemnizar a los perjudicados... está luchando por la supervivencia de su empresa de la única manera posible.
(Cada vez que hay un caso de estos me pregunto cuanto dinero están invirtiendo las telefónicas y cacharreras en proyectos como el Reflex.)
En estos días, con todo el jaleo de la intoxicación por salmonella en el pollo precocinado, he visto una similitud tremenda del caso (incluyendo a la empresa fabricante del producto envenenado (el grupo Sada)), con otro caso de contaminación muy peligrosa para la salud: el caso del amianto, y como reaccionaron las distintas empresas cuando se descubrió que su producto estaba haciendo enfermar a muchísima gente.
En el caso del amianto, cuando se empezó a comprobar que la gente enfermaba, hubo dos actitudes:
-La primera, negar los hechos, tratar de eludir responsabilidades.
-La segunda, transparencia, investigación independiente de los hechos, ofrecimiento de indemnizaciónes.
Al cabo de unos años, cuando se demostró la peligrosidad del producto, sólo las empresas que reaccionaron de forma colaborativa, sobrevivieron. Y lo hicieron porque pudieron hacer frente a las indemnizaciones, no tuvieron condena penal, obtuvieron avales para continuar, y lo mas importante, conservaron la credibilidad ante sus clientes: han hecho algo mal, lo han detectado, han dejado de hacerlo, y ofrecen reparación. La actitud es moralmente intachable.
Por eso he llegado a la conclusión de que, bien el director del Grupo Sada es muy inteligente, bien ha estudiado el caso del amianto en algún master. Ofrece transparencia, ofrece información, ofrece indemnizar a los perjudicados... está luchando por la supervivencia de su empresa de la única manera posible.
(Cada vez que hay un caso de estos me pregunto cuanto dinero están invirtiendo las telefónicas y cacharreras en proyectos como el Reflex.)
5 comentarios
Atlante -
capitanmierda -
Arkangel -
Bromas aparte, precisamente vengo del Mercadona donde compré el pollo en cuestión, y efectivamente en este caso todo son facilidades: no hace falta ni el ticket para que te devuelvan el dinero. Se ve que el Grupo Sada ha dado orden de facilitar al máximo las cosas, que ellos pagan.
Yo de momento sigo con el pollo en la nevera, que no me lo he llevado de paseo para enseñarlo, pero ya no se que haré, si lo guardaré de recuerdo o algo... Si alguien lo quiere para comprobar si tiene salmonella, yo se lo mando :))
(aunque parece ser que la partido que llegó aquí no estaba afectada, el mismo dependiente comió pollo ese día, y me lo creo...)
Fernando -
Pero debo de ser un poco masoca, porque es de las cosas que mas me gusta de mi trabajo, el ver los proyectos en todos los niveles, desde la parte más técnica, a la parte de gestión.
Lobo -
Por cierto, ya estoy de vacaciones en cosa. A ver si arreglo unas cuantas cosas en mi blog. Entre otras enlazarte.