El diminutivo eufemístico
No se si es cosa de la expresión en Aragón, o es común a todos los que hablamos español. Pero es una costumbre que me pone los pelos de punta:
Llamar en diminutivo a las cosas que duelen, que son desagradables. Ejemplos:
"Tuvo un accidente y se quedó cieguica"
"Tapó el rostro del cadáver con su pañuelo para que no se le posaran las mosquicas"
"El pobre es cojico"
Como si por llamarlo en pequeño, fuera menos duro, menos macabro, la realidad lo fuera menos e hiciera menos daño.
Lo dicho, me pone los pelos de punta.
2 comentarios
inde -
Pues eso. Qué malasombrica.
carlos -