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bambino, el blog de Fernando Tomás.

El Fantasma de los Ojos Azules

El Fantasma de los Ojos Azules

Para mi fué mi casa. O una extensión de mi casa. A raticos sólo (nunca tenía ni mucho tiempo ni mucho dinero). Pero mi casa.

Recuerdo los muebles reciclados, el poder beber cualquier cosa sin que te miraran raro, fuera cerveza con gaseosa, vino tinto, pacharán o gaseosas El Tigre , la música siempre diferente, las partidas de parchís, la conversación interminable, la sensación de que todo es nuevo y fascinante y tu formas parte de ello.

Allí me escapaba con Carmen cuando salíamos 1.0, y también cuando salíamos 2.0, entre semana, y en esas noches de calor y de tensión pre-exámenes. Allí quedaba con los amigos. Allí escuchaba y aprendía de música.

Recuerdo el nunca disimulado olor del baño, con esa máquina de condones rota, la pintada de Aupa Riojanos Exiliaus! (con el logo del PGB)

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(Mis recuerdos están en Rocasolano, claro. La Paz ya me pilló o fuera, o con lío, y no lo he llegado a experimentar. Pero reconfortaba saber que aquello seguía allí).

 

Hoy siento esa sensación de que algo desaparece de mi vida definitivamente. No es como cuando se muere alguien (que eso son palabras mayores). Para entendernos, es la misma sensación que sentí cuando cerré por última vez mi casa de La Haya y eché las llaves por el buzón. Punto y final con aquello. Punto y aparte en mi vida.

Mañana se cierra El fantasma de los ojos azules . Sólo me queda decir con emoción:

Yo no estuve allí: yo VIVÍ allí.

Siempre lo recordaré.

 

4 comentarios

D.D. -

Sí que es un símbolo de algunos jueves y casi todos los viernes de nuestros últimos años de la universidad; me acuerdo de pasar por ahí muchos sábados al volver a casa por si estaba el Dani y liarnos con la última (y las siguientes).
Y que un mechero costaba 150 ptas, si comprabas 3 salía por 500.
Un día cerró el Pasaje Miraflores, otro el Pop, el Sol de la universidad, el Central, algún día cerrarán el Churruca y la Recogida y el Zeta y el Limbo, e igual ni me entero.
Se pasó nuestra época, Bambino, al menos la de nuestros bares; semos viejos.
Qué morriña.

Yuca -

No sabía que lo cerraban, me hubiera acercado a echar la última copa. Me da pena, yo también viví allá, aunque hace ya muchos años que no lo pisaba, porque también me traía recuerdos tristes. En fin, nos hacemos mayores...
Saludos.

Alfonso -

No era muy asiduo, pero siempre da pena ver cómo tus vivencias se van quedando atrás, y sólo quedan los buenos recuerdos.

raul sensato -

No salgo de mi asombro. Cierra el fantasma!

Si alguna vez hacen el equivalente de la película "24 hours party people" sobre zaragoza, el fantasma será una pieza imprescindible...

...en fin... también murió el pyramis... y grabaciones interferencias... pufff....