No a la traza privada sin control judicial

carlos emilio - 11 de julio de 2006 - 00:45

Agustina hija, no te crea que eres aquella AGUSTINA DE ARAGÓN, no, ni tan poco creo que tienes 8 añitos, ano sé, que los tenga en cada dedos de la mano y de los pies, ¿Me supongo que tienes padre y madre padre, verdad hija? Pues a ellos me dirijo. Pero antes voy a decirte que una niña como tú, no es capaz de pensar ni de escribir lo que tu escribe, más bien son tus padres lo que lo hace en tu nombre. Ellos son tan cobardes que se esconde en tu inocencia, y publica los sentimientos de ellos, sentimientos que están influyendo en tu vida hijita Agustina.
A ti no Agustina, a tus padres le diré que aunque los militares no daba los cadáveres que asesinaban, habría una razón, quizás por que no conocían sus procedencias, había personas de muchos lugares, no había tiempo de ellos.
Pero, lo rojos asesinaban macabramente y tampoco se lo daban a sus familiares. Por ejemplo: PARACUELLOS, EL JARAMA, LOS ROJOS ASESINARON A MILES DE PERSONAS. No digamos lo que fusilaron en muchos pueblos de Sevilla. Pero, hay algo que quiero que sepa papaíto y madrecita. ¿Conocéis lo que pasó en la prisión de Alicante, allá en los años 1937 ? No verdad. Lo cuenta un republicano arrepentido y su conciencia lo perturbó durante muchos meses de la macabra forma que tuvieron los rojos republicanos, de fusilar a los cinco falangistas. Había formada dos pelotones, uno de guardias de asaltos, y otro formados por republicanos, en este último había dos mujeres, una conocida por la TETE de Barcelona, su vida era de prostituta, la otra era conocida por la FUSILERA LE PEGÓ UN TIRO A SU PROPIO HERMANO, todo por que era falangista. era de un pueblo de Sevilla LORA DEL RIO.
En el fusilamiento, que de la prisión de Alicante, había más de 50 hombres y mujeres, cuando los cinco falangistas estaban en el patio de la prisión para ser fusilados, José Antonio, levantó el brazo derecho y dijo: ARRIBA ESPAÑA la fusilera no esperó la voz de mando del teniente de los guardia de asalto, y ella, empezó a pegarle tiro a José Antonio. Así estuvieron más de 15 minutos, luego continuaron con los otros cuatros falangistas. Ordenaron a TOMAS SANTOJA, que era el enterrador del cementerio de Alicante. Que los enterraran en una fosa a los cinco, y que cambiaran los nombres de los falangistas por otros muertos, o sea, cadáveres anónimos. Gracias a Tomás Santojas, que arrepentido de la macabra forma que llevaran a cabo, se entregó a las fuerzas militares cuando fue tomada la plaza de Alicate, y divulgó lo sucedido.

Si quiere Padre de Agustina, te mando la documentación histórica de la declaración de Tomás Santoja, hasta te mando su foto.

No pongas más a tu hija por escudo imbécil, cuando tengas que hablar algo, hazlo tú sólo como los hombres.¿?

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